EL ARTE DE DECIR QUE ESTAMOS SOLOS “HABLE CON ELLA”
EL ARTE DE DECIR QUE ESTAMOS
SOLOS
“HABLE CON
ELLA”
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"¿Cómo sabes que no puede hablar si
no has hablado con ella?" tal vez sean estas palabras impuestas al personaje
principal, el enfermero Benigno (Javier Cámara), las que mejor trasluzcan las intenciones de Pedro
Almodóvar en esta su catorceavo entrega cinematográfica, Hable con Ella. Una película que además de premios (El Goya y El
Oscar a Mejor Guion), nos da de manera muy trasgresora y gutural un mensaje en
favor de la voz humana, como medio efectivo contra los problemas de
comunicación y remedio para aplacar la soledad. Una obra que en palabras del
mismo director “es una historia de absoluta soledad”.
Hable
con ella abre el
telón con una magnífica interpretación de Pina Bausch, que nos muestra en una
sola escena teatral (Café Müller): el amor, el dolor y la soledad; mezcla feroz
que se va diluyendo por entre las mejías del periodista Marco Zuluaga (Darío
Grandinetti), y sirve de excusa para adentrarnos en la sensibilidad de los
personajes.
Dos hombres que se conocen por la tragedia,
hombres solitarios golpeados por el destino, enamorados sin ser correspondidos,
solos aún en compañía. Benigno enamorado de Alicia Romero (Leonor Watling), bailarina
de danza contemporánea que desde hace 4 años lleva en coma por un accidente de
tránsito y Marco enamorado de Lydia Rosario
(Rosario Flores), una torera que acaba de terminar una relación tormentosa con el
“El Niño de Valencia” y a causa de una mala toreada en Córdoba acaba de entrar en
coma. Amores que se van fundiendo y destrozando paralelamente, dejándonos un
final abierto, entre danzas teatrales y lágrimas de hombre.
Hable con ella, es como diría Guillermo Cabrera Infanta: La película más
delicada de Almodóvar. Ya que hasta el acto más deplorable se nos muestra en
forma de sueño y metáfora, al mostrarnos un falso corto en blanco y negro que
nos adentra en la carnalidad humana y nos muestra una pareja de científicos; en
la que el héroe (Fele Martínez), un hombre en miniatura que penetra el umbral
de la vagina de su amada (Paz Vega).
Esta cuarta entrega cinematográfica con
protagonistas varones, del director manchego, tiene una duración narrativa de
un año y se ha rodado en escenarios reales de 3 países: España, Argentina y
México, está narrada en distintos tiempos mediante flashbacks, logrando
entrelazar el presente con el pasado, y haciendo al espectador partícipe del
complejo multiuniverso creado por Almodóvar, que hace de esta historia trágica
romántica una moraleja de la sociedad enferma de soledad y amor en la que
vivimos.
Su lenguaje sonoro y la armonía de
colores que presentan; Alberto Iglesias y Javier Agirresarobe, nos meten de
lleno en la psicología desaforada de hable
con ella, que nos pide a gritos que nunca dejemos de hablar, aun cuando
nadie nos escuche.
Por: Jesus Yangali
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